Un poco de misericordia hace al mundo menos frío y más justo. -Papa Francisco- Érase una vez una mujer que hablaba con Dios, y Dios hablaba con la mujer. Cada día, la mujer hablaba con Dios, y Dios hablaba cada día con la mujer. Se enteró el obispo, que llamó a la buena mujer y le dijo: —¿Es verdad que usted habla con Dios? —Sí, monseñor, hablo con Dios. —¿Y Dios habla con usted? —Pues sí, Dios habla conmigo. Entonces el obispo le dijo: —Pues bien, esta semana yo confesaré mis pecados a Dios, y le ruego…
Antonio Rojasmarzo 24, 2017