SÍ, NO, O ESPERA UN POCO

05/03/2022 | Por Arguments

Antonio Rojas

Arguments

catequesis

la chispa

">http://www.arguments.es/wp-content/uploads/lachispa/2022/03/Si-no-o-espera-e1646521211104.jpg"> Ora como puedas, cuando puedas y cuanto puedas. Tú mismo te admirarás de la transformación de tu vida. -G.K. Chesterton- Las cosas muchas veces no son lo que parecen… Las apariencias engañan. Se cuenta que una vez un hombre era perseguido por varios malhechores que querían matarlo. El hombre se escondió en una cueva. Los malhechores empezaron a buscarlo por los alrededores de donde él estaba. Tan asustado estaba que elevó una oración a Dios: —Dios todopoderoso, haz que los ángeles bajen y tapen la entrada para que no entren a matarme. En ese momento oyó a los hombres acercándose a la cueva en la que él se encontraba, y vio que apareció una araña. La arañita empezó a tejer una telaraña en la entrada. El hombre volvió a elevar otra oración, esta vez más apurado: —Señor, te pedí ángeles, no una araña. Y continuó: Señor, por favor, con tu mano poderosa coloca un muro fuerte en la entrada para que los hombres no puedan entrar a matarme. Abrió los ojos esperando ver el muro tapando la entrada, y observo a la arañita tejiendo la telaraña. Cuando los malhechores estuvieron frente a la cueva en la que se encontraba el hombre, ya la araña había tapado toda la entrada, entonces se oyó la siguiente conversación: —Vamos, entremos a esta cueva. –dijo uno. —No. ¿No ves que hasta hay telarañas?, nadie ha entrado en esta cueva. Le respondió otro. Y se marcharon los malhechores dejando tranquilo al hombre. Desgraciadamente solo nos acordamos de santa bárbara cuando truena y, así, convertimos nuestra relación con Dios en una especie de conjuro mágico para que nos resuelva todos nuestros problemas, y los resuelva a nuestra manera, porque pensamos que nuestras peticiones son sensatas y razonables. Cuando pensamos así nos olvidamos de tres palabras: Hágase tu voluntad. Por eso pedimos ángeles fuertes y no vemos la respuesta de Dios en una araña.  Dios responde siempre, pero a su manera: Si le pedimos a Dios un árbol, nos lo dará en forma de semilla para que nosotros la cuidemos, la hagamos crecer y al final tengamos el árbol que le pedimos. El médico Alexis Carrel, premio Nobel de medicina en 1912, recomendaba orar en cualquier lugar: en la calle, en el trabajo, en la escuela, en la diversión…Transformar los momentos libres rezando por nuestras necesidades y las de todas las personas y situaciones que nos rodean. Y, después de rezar, confiar en que nuestras oraciones serán escuchadas. Lo serán, seguro, porque toda oración tiene siempre una de estas tres respuestas: si, no, o espera un poco.

Artículos relacionados

Suscríbete a nuestro canal de Telegram


Síguenos en

Arguments