Carta de una estudiante provida a Gallardón

23/09/2014 | Por Arguments

carta

dimisión

estudiante

Gallardón

Judit

ley del aborto

provida

Ruiz-Gallardón

">https://www.arguments.es/wp-content/uploads/culturadelavida/2014/09/Judit.jpg">Estudiante provida Querido Señor Gallardón, Estamos con usted. Quiero escribirle esta humilde carta para decirle que le apoyo. Que le defiendo. Que respaldo sus ideas. Las mismas. Las de todos. Que el gobierno de España está para representar al pueblo y usted, a mí, me ha representado. Más que Rajoy, más que Artur Mas. Usted ha defendido el mayor y más elemental de los derechos, la VIDA. Usted ha hablado de esperanza en una sociedad que la pedía a gritos. Si usted dimite, Señor Gallardón, yo me quito el sombrero. Porque sé que ha luchado por el Bien, sé que ha luchado por la Verdad y sé que se puede ir a la cama tranquilo por las noches porque lo que defiende es la VIDA y no cualquier cosa. Le felicito por demostrar a España que es más importante la vida que el trabajo, que el propio orgullo o que el tener un puesto de poder en el gobierno. Por manifestar que la Verdad es la que nos guía y que no tiene que haber interferencias entre las personas y la misma. No es cuestión de imponer una ideología ni de demostrar nada, solo precisamos respeto. Respeto por la simple –y a la vez codiciada por tantos- existencia. Respeto por las mujeres embarazadas, especialmente por aquellas que se quedan embarazadas de manera indeseada, respetémoslas. Démosles ayudas para que puedan tener a sus hijos. Creemos entre todos una sociedad en la que un embarazo no sea un drama, sino una alegría. Luchemos por unas madres libres. Por unos hijos deseados y queridos. Batallemos por una sociedad que nos permita vernos reflejados en ella. Por la vida. Por la belleza. Por el bien. Soy catalana, una simple estudiante de farmacia y no soy afiliada al Partido Popular. Pero tengo sueños y Alberto Ruiz-Gallardón me ha demostrado que se puede lidiar por ellos. Que se puede pelear. Que la batalla no está perdida. Que usted dimita no es un fracaso, al contrario. Que usted dimita es un ejemplo para muchos. Hay ideales que son cuestión de vida o muerte defenderlos y usted, hoy, lo ha hecho. Gracias por enseñarnos esta lección. Judit Borrell Escudé

Artículos relacionados

Suscríbete a nuestro canal de Telegram


Síguenos en

Arguments